LA POLÍTICA

Todos hablamos de política, mucha gente dice que todo es política, pero realmente ¿cuánta gente cree en los políticos ?
La política como “arte de lo posible”, es una buena definición, siempre y cuando esté al servicio de la ciudadanía; la cosa cambia, cuando la política se utiliza en provecho propio.
Hace algún tiempo que estamos asistiendo como espectadores a la eternización de los políticos, esos que, prometen, en un arrebato que en ocho años se van, y luego están media vida viviendo de los impuestos que pagamos todos, sin intención de retirarse, porque no tienen otro medio de vida o porque en política cobran bastante más que con el trabajo que desempeñaban antes de entrar en ella. esta gente es la que empobrece y ensucia la política; es la que pone zancadillas porque se le mueve el sillón cada vez que hay elecciones o cambios en los partidos a los que pertenecen, la que filtra noticias no fiables para perjudicar a quien les puede hacer sombra, en definitiva, son los sicarios de la política.
Los políticos con mayúsculas son los que están en política porque quieren cambiar la sociedad, y lo hacen a cambio de nada, de forma altruista, son los que quieren una sociedad más justa, más solidaria, están para servir y que nadie les agradezca nada. si se practicara así la política, la gente creería más en los políticos.